“Gracias Señor por tu amor y fidelidad” dijo Mestre en la Misa del 25 aniversario sacerdotal. Padre, hermano y amigo de todos.


En una celebración religiosa realizada en la Catedral, el obispo Gabriel dijo “Gracias Señor por tu amor y fidelidad”; lo hizo en nombre propio y del Padre Fernando Mendoza, compañero de ordenación sacerdotal.
Estuvieron acompañando al obispo Gabriel y al P. Fernando obispo prelado de Cafayate, Mons. fray Darío Rubén Quintana -quien fuera auxiliar de Mestre- y el obispo emérito, Mons. Antonio Marino, junto a todo el clero diocesano, diáconos, seminaristas, autoridades, familiares y amigos del Padre Obispo.
La homilía fue compartida entre los dos sacerdotes que festejaban los 25 años

VER HOMILÍA COMPLETA “Gracias Señor por tu amor y fidelidad” (Sal 138,1a.2b)

En nombre de los laicos Mara Casademut, de Villa Gesell, agradeció al obispo su ministerio de amor y servicio en todos los rincones de la diócesis. “Sos un obispo que hace el bien en cada uno de nosotros, especialmente en los más humildes y sencillos. Los laicos te queremos y rezamos por vos”, finalizó.
Luego el P Hernán David, en nombre de los religiosos dijo a sus hermanos Gabriel y Fernando “que estos 25 años fueron un canto de disposición al Señor y a su gente, siguiendo el testimonio del querido venerable Cardenal Pironio. Querido padre obispo, sentimos tu paternidad, pero sos también para nosotros hermano y amigo. Gracias por tu sacerdocio entre nosotros», finalizó el sacerdote.
Antes de culminar la Misa, Marcela González, Marta Castaña o.v.c., el diácono permanente Marcelo Benavidez y el P. Oscar Maipah, hicieron entrega a Mons. Gabriel de un báculo, signo de Jesús Buen Pastor, en nombre y como expresión del cariño de toda la Diócesis de Mar del Plata
Finalmente, el obispo destacó en su agradecimiento que en cada rincón y con cada persona y comunidad de la Diócesis se siente verdaderamente “en su casa”.

Luego de la bendición todos los presentes expresaron su afecto en el saludo personal.

Fotos Elena Cechi