Este domingo 18 de mayo, en coincidencia con el día en el que el Santo Padre León XIV inició en Roma el ministerio petrino, se celebró una solemne Misa de acción de gracias en la Catedral Basílica de los Santos Pedro y Cecilia. La misma estuvo presidida por el vicario general de la diócesis, presbítero Hernán David, quien acercó el saludo del obispo Ernesto Giobando, que se encontraba en Gral. Madariaga en la misa de toma de posesión del párroco de esa comunidad.

Durante la celebración se elevó en nombre de toda la comunidad diocesana, una plegaria por el nuevo pontífice, a la vez que hicieron eco las palabras pronunciadas por Su Santidad en la Plaza de San Pedro, en la que expresó “quisiera que este fuera nuestro primer gran deseo: una Iglesia unida, signo de unidad y comunión, que se convierta en fermento para un mundo reconciliado.”