Este 2 de abril, como cada aniversario de la recuperación de las Islas Malvinas, acompañamos desde la oración a nuestros héroes que aún están, y encomendamos al Señor a quienes ya partieron.
Monseñor Ernesto Giobando realizó una invocación religiosa durante el acto oficial acompañado del intendente municipal Guillermo Montenegro, en la que pidió al Señor por “quienes murieron en el campo de batalla; quienes al volver, no encontraron motivos para seguir viviendo; quienes quedaron heridos y enfermos; quienes con su empeño se integraron a nuestra sociedad argentina, todavía deudora de cuidado y protección para los excombatientes; y todas sus familias y las comunidades de las que forman parte.”
Por la tarde, se celebró en la Iglesia Catedral una Misa en la que se nombró a los caídos en combate de nuestra ciudad, y a quienes partieron luego del conflicto, de una nómina elaborada por el Centro de Ex Soldados Combatientes en Malvinas de Mar del Plata.
En la homilía el padre Juan Cruz Mennilli, párroco de Santa Ana y capellán de la Base Aérea Militar Mar del Plata, pidió a la Virgen María “que nos ayude a todos a ser buenos hijos de nuestra Patria, como lo son nuestros héroes aquí presentes, los que caminan con nosotros a lo largo y a lo ancho del país, y también aquellos que aguardan la resurrección siendo prenda y eterno recuerdo de lo nuestro, que mereció la entrega de la propia vida.”
También compartió el relato de uno de los capellanes que acompañó a las tropas en Malvinas, destacando el rol de la Virgen, tanto para ellos como para sus familiares.
Se encontraban presentes los jefes de las unidades militares de las tres Fuerzas Armadas, y ex combatientes de la guerra de Malvinas, quienes recibieron el reconocimiento y la oración de los fieles que acompañaron la celebración.